Algunos consejos para renovar tu cocina

Hay de remodelaciones a remodelaciones. Por supuesto que una profunda, que “arrase” con todo, donde todo sea nuevo, siempre se nos antoja. Pero lo más frecuente cuando hacemos una renovación es que nos quedemos con las cosas que aún se encuentran en buen estado. Y vayamos de sección en sección, como la cocina. Así los recursos y el tiempo rinden más.

Vamos a explicarte los distintos niveles a los que puedes llegar si pretendes renovar tu cocina, del más superficial al más profundo.

Pintura y luminarias

Una manera sencilla y poco costosa de darle una cara nueva a tu cocina es pintándola y cambiando las luminarias. Quizá tengas azulejo en los muros, pero es muy probable que no llegue hasta el plafón; puedes pintar ese remate de los muros y el plafón mismo. Te recomiendo una pintura vinílica de alta calidad, totalmente lavable, para que te aguante mucho y la puedas mantener limpia, sin tener que recurrir a un esmalte, que no luce muy bien dentro de las casas. También te recomiendo que elijas un color claro; a fin de cuentas la cocina es un lugar de trabajo y la luz es esencial.

Sustituir las luminarias también puede darle a tu cocina un ambiente nuevo. Piensa en lámparas de alto wattaje y de temperatura más bien fría; la luz blanca es la ideal para estos espacios. Piensa también en una luminaria que permita que la luz llegue a todo el espacio, en lugar de una que provoque sombras o que dé luz indirecta; algo así sería conveniente para una zona de estar, como la recámara o la sala.

Enchapados y electrodomésticos

Si quieres provocar un cambio más visible puedes involucrar a un carpintero que recubra con una nueva chapa al menos las puertas de los muebles integrados de la cocina. La variedad es grandísima. Puedes elegir alguna chapa de acabado sintético y el color que te imagines; puedes escoger una metálica; o puedes optar por una plástica que aparente madera, una de madera precompuesta con barniz, o bien una de verdadera madera natural. Las alternativas son muchas y también los precios. Sin duda con esta acción la cocina se verá muy diferente. 

En este nivel de remodelación también podrías pensar en sustituir tu estufa, tu tarja, y tu refrigerador por unos nuevos.

Muebles integrales  y cubierta

Lo siguiente sería cambiar la cocina integral completa, todos los muebles, incluyendo su cubierta. Sin duda esta sería una inversión mayor, pero la renovación sería profunda, y cuidándola te puede durar quince o veinte años en perfecto estado. Así como hay un montón de acabados o chapas para los muebles, también existe un sinnúmero de tipos de cubierta: desde las de panel tipo aglomerado recubiertas de chapa sintética llamada “formaica”, hasta las de cuarzo natural, granito, o mármol, pasando por las precompuestas conocidas como “Corian”. Si vas a optar por una piedra natural, te recomiendo el granito: el mármol es “suave” para cubiertas de cocina, y el cuarzo es muy costoso.

Azulejos

Si en tu cocina los azulejos son muy visibles, también los puedes cambiar. También puedes usar el mismo material que hayas elegido para la cubierta como lambrin en algunos muros.

Piso nuevo para tu cocina

Lo último que podrías cambiar es el piso. Opta por uno de tráfico alto y limpieza sencilla; tú sabes que la cocina hay que mantenerla siempre pulcra. Evita las juntas grandes entre las piezas, y de ser posible opta por un zoclo sanitario: redondeado, sin esquinas, para que no se acumule la suciedad.

No dudes en acudir con Ferretera Ermita para encontrar entre todas estas alternativas las que mejor se adapten a tus gustos, necesidades, y presupuesto.